Hay días que uno se levanta mal, enciendes la TV, y ya empienza el bombardeo para animarte la vida de perros que llevamos, qué si el Corte Inglés para hacerte sentir un miserable, qué si los villancicos,( que cualquier año se despistaran y los sacaran el Día de Todos los Santos), qué si el último reloj, y piensas, !pero si ya tenemos de todo! Estos pensamientos que tiene parte de la población, es parte de la Navidad. la otra cara de la moneda.
El reverso es, el que ama la navidad, aunque se cabree con la colocación de las luces navideñas, del portal de Belén, de la arpía de su mujer y de los niños con sus trabajos manuales del colegio,que no le dejan vivir en paz por unos días.
Por eso Eugenio se quería fugar estas navidades, ya estaba cansado de las lucecitas navideñas compradas en los comercio de" TODO A CIEN", pués el año pasado, aún recuerda cuando colocandolas en el arbol, bajo el atento mirar de la familia le pegó tal garrampazo de electricidad,que los pelos de la barba se le chamuscaron en un abrir y cerrar de ojos, ni que decir tiene, de la cena de Nochebuena, todo armonía fraternal, hasta que el alcohol invade las venas de todo Dios, y se armó el Belén, y tener que aguantar a los moros del piso de abajo, con sus letanias
y olores de curri,inundando toda la escalera, que dá la sensación de estar en una jaima.
Eugenio, ya lo tenía decidido, este año al chalet,con su perro paciente y callado, y a cantar solo los villancicos.....
Pero maldito despertador, que lo despertó en lo mejor.
!si todo ha sido un sueño!
Hay días que uno se levanta mal, LAS NAVIDADES SERAN COMO SIEMPRE.
PAZ Y AMOR, la osti.
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